El club entrega la insignia de oro a Bruno, Mario y Musacchio tras superar dos centenares de partidos
El Villarreal CF ha querido reconocer el duro trabajo de la plantilla esta temporada y ha hecho a entrega a Mario, Musacchio y Bruno de la insignia de oro del club por acumular más de 200 partidos con la camiseta del Submarino. La entrega ha tenido lugar durante la comida de fin de temporada en el Restaurante Entrelíneas y con la que el Submarino ha querido reconocer el trabajo de jugadores, cuerpo técnico, directiva, patrocinadores y afición en una campaña histórica para el Submarino.
Tras la disputa de la temporada 2015/16, Bruno Soriano, que no pudo recoger el galardón por estar con la Selección Española, acumula nada menos que 372 encuentros (283 Liga, 62 Europa y 27 Copa del Rey) con la camiseta amarilla, mientras que Mario ha jugado 227 (176 Liga, 37 Europa y 14 Copa del Rey) y Mateo Musacchio acumula 219 (166 Liga, 35 Europa y 18 Copa del Rey). El capitán del Submarino, Bruno Soriano, recogerá la insignia del oro del club tras su estancia con España.
Musacchio: “Es un detalle muy lindo, son siete años en el Villarreal”
El central argentino del Villarreal CF, Mateo Musacchio, destacó que se trata de un buen gesto por parte del club que siente como propio. “Es un detalle muy lindo, me hace mucha ilusión. Estoy muy bien en el Villarreal, es mi casa. Ya son siete años aquí y son muy feliz en este club, me siento muy cómodo. Parece que fue ayer, pero ya son muchos años aquí. Estamos viviendo un momento increíble. El club ha crecido muchísimo desde que llegué y está siendo un año impresionante para nosotros porque el equipo ha hecho una grandísima temporada”.
Con respecto a la próxima temporada, el zaguero argentino explicó que los amarillos deberán elevar aún más su nivel de exigencia, ya que la posibilidad de disputar la Liga de Campeones supone todo un desafío para el Villarreal. “Ya hemos jugado otras previas y sabemos que hay que llegar muy preparado y muy pronto, pero trabajas para estar en el mejor momento cuando te llega una oportunidad así. Es una eliminatoria clave que condiciona todo el año, pero la afrontamos de la mejor manera y con la voluntad de conseguir el objetivo. El año que viene hay que ser más exigente porque el nivel será aún más alto”.
